El funcionario, designado por Mauricio Macri para reemplazar a Emilio Pérsico al frente de la Secretaría, dijo que los ejes en los que basará su trabajo son la "participación, mucha comunicación, mucho caminar el terreno, federalismo e interacción entre organizaciones a las que hay que fortalecer así como fortalecernos nosotros que tenemos que prestar servicio".
Ingeniero agrónomo, docente rural y comunicador, Alloatti es entrerriano de nacimiento pero desarrolló toda su carrera en Santa Fe donde se desempeñó como responsable de la cartera de Agricultura en dos oportunidades.
Aseguró que su gestión apunta a la "articulación de los organismos y de los recursos", en una entrevista concedida a Télam.
"No hay mejor forma de perder los recursos de todos que no coordinar. Eso es superponer esfuerzos y descuidar recursos. Entiendo que el federalismo es hablar con el dueño de casa y potenciar lo que tenemos para lograr el máximo de resultados en el menor tiempo posible para la mayor cantidad de gente posible", aseguró en cuanto a la tónica con la que encara su gestión.
Respecto del presupuesto para el área, para el que se pautaron unos 1500 millones de pesos, Alloatti puntualizó que "cada repartición lo tiene que luchar para obtenerlo y si no alcanza para todas las actividades, se verá cómo obtener los recursos. Yo siempre trabajé en grupo y por consenso" en referencia a los programas y capacitaciones que la SAF impulsa.
El funcionario no precisó que pasará con los 1500 trabajadores que depende de la cartera, ni aludió a posibles despidos en el organismo nacional repartidos en 24 delegaciones en todo el país. Sí fue taxativo fue en la necesidad de "consolidar los logros importantes" del área.
"Desde que era Subsecretaría hay logros importantes que hay que consolidar. El ministro (Ricardo Buryaile) me pidió que aplique la experiencia y gimnasia que adquirí a lo largo de los años. No somos de tirar una pared porque no la construimos nosotros, si la pared está firme, ahí ponemos el techo", definió.
En esos logros incluyó producción y abastecimiento, agregar valor, el sello de la agricultura familiar y en cuanto a las tareas por hacer puso en el primer lugar "capacitar a las organizaciones" en una perspectiva productiva.
Alloatti dijo que la ley 27118 de Agricultura Familiar fue "muy pensada, con mucho detalle que explica la filosofía con la que se generó" en referencia a la función social de la tierra e impedir desalojos de campesinos. Recordó que entre otros alcances la norma incluye a "gente que ni siquiera tiene un pedazo de campo pero trabaja con sus brazos, cosecheros de caña, los que andan con un machete, con un hacha. Ellos son también parte del trabajo".
Además de la ley, la pasada gestión al frente de la SAF conformó una Mesa de Diálogo integrada por organizaciones campesinas y cámaras de agronegocios para buscar salidas al conflicto por la tierra que dejó muertos (Cristian Ferreyra en noviembre del 2011 y Miguel Galván en octubre del 2012) y desalojos.
Inspirada en una idea impulsada por el papa Francisco, por entonces cardenal Jorge Bergoglio, el organismo fue institucionalizado a través de una resolución.
Al asumir la nueva gestión el pasado 23 de diciembre se formalizó una convocatoria que contó con la presencia del presidente de la Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, representantes de las organizaciones empresariales y campesinas.
A la reunión asistieron además de Alloatti, el jefe de Gabinete del ministro Buryaile, Guillermo Bernaudo, quien dijo que en la agricultura familiar "tenemos una gran expectativa para generar un cambio importante que le permita al sector lograr una escala comercial, desarrollarse y ampliarse como actividad".
Por su parte, el secretario de Coordinación y Desarrollo Territorial, Santiago Hardie, destacó "la capacidad que la agricultura familiar posee para generar empleos productivos y motorizar el crecimiento local, es un aporte central para el progreso de las economías regionales".
Fuente: Telam
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